mierda

Tener miedo. No como película de terror, no espanto, no pánico. Simplemente quedarse parado, quieto, sin saber qué hacer, cómo seguir, a dónde ir si no es a donde nos lleva la vida. El querer cambiar y no poder, lo patético de perder la movilidad, la decisión propia. Lo triste de ser un paralítico emocional, un atrofiado en la vida. Lo absurdo de querer autoabastecerse cuando se trata de amor. No hay amor propio, es ridículo. Se perdió, no se encuentra, no se busca en realidad. Lo intrincado de no poder vivir sin amor, sin el amor del otro, del único que ama a este bicho, porque ¿por qué voy a decir mujer? ¿por qué decir humano? ¡¿Y por qué decir bicho?! Mierda. Si no soy nada.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario